lunes, 16 de septiembre de 2019

introspección submarina

©pazos2019

Fue a buscar el manuscrito de 1890. 
Como introspección no estaba mal. Las aguas profundas no lo habían ahogado; al contrario, superado el mínimo requisito técnico- el equipo de buceo- fue fácil recuperar novelas, ensayos y proyectos inconclusos diseminados en un océano de Tiempo: su breve existencia duró lo que le llevó recuperar los manuscritos que habían sobrevivido a esa destrucción.

El primero data de 1890.










el Prometeo moderno

©pazos2019

cocineros

                                                                                       ilustración de Roberto Pazos